Este es sin duda -hasta ahora- el libro sorpresa de este año. Había querido leerlo desde el año pasado, pero desistí cuando no vi buenas reseñas al respecto; pero ahora cuando por fin decidí darle una oportunidad, vaya sorpresa que me ha dado esta historia; me ha gustado bastante.

Después del Deshielo nos introduce en el mundo de los vikingos. Los clanes de los Askas y los Rikis, se han enfrentado desde siempre, cada 5 años, pues así lo dicta la tradición y la voluntad de los dioses.

Durante la temporada de lucha, Eelyn, una guerrera Aska se enfrenta a un guerrero Riki, cuando de pronto ve a su hermano. Hermano que supuestamente había muerto cinco años atrás, y de quien ahora no sólo se da cuenta de que está vivo, sino que es el enemigo, ahora es un guerrero del clan que ella tanto odia.

Desesperada por obtener respuestas corre en su búsqueda en plena batalla pero lo que consigue es ser capturada y así convertirse en prisionera de los Rikis.

A partir de ese momento, se desencadenará una serie de hechos que desafiarán y atentarán contra la forma de vida que todos conocen.

Eelyn es obligada a dejar atrás su clan, a su padre, a su mejor amiga y compañera de batalla, y todo su mundo, para instalarse en una de aldea Riki en las montañas, hasta que comience el deshielo y pueda finalmente regresar a casa. Ahí se enfrentará al odio de los Rikis pero al mismo tiempo descubrirá que no son tan diferentes a ella.

Gracias a Eelyn podremos conocer más sobre sus tradiciones, cómo viven, cómo piensan, sobre su Dios, y qué los motiva a pelear una y otra vez contra su enemigo: los Askas, al mismo tiempo que, junto con ella, descubriremos porqué su hermano está vivo y porqué decidió formar parte de los Rikis... algo que ella considera como una traición.

Sin embargo todo cambia cuando son atacados por los Herjas, un clan de guerreros que arrasa con las aldeas a su paso, mata a quienes puede y captura prisioneros. Los Herjas, se creía eran un mito, y no se consideraba que fueran reales, pero cuando la amenaza es latente, la supervivencia de los clanes pende de un hilo.

Con los Herjas como enemigo en común, los Askas y los Rikis deberán unir fuerzas para luchar juntos, pero no es tan sencillo como parece, primero deberán dejar de lado ese odio mutuo que se profesan y confiar los unos a los otros, algo que parece imposible pues en su mente solo existe de deseo de matarse entre ellos.

Todo esto, hizo que este libro me diera una sorpresa que no me esperaba. Adrienne Young nos da un historia que te atrapa desde la primera página, ágil y dinámica que hacen la lectura adictiva y muy fácil de seguir.

Se trata de una historia que va más allá del odio entre dos clanes, se trata del destino, del designio de los dioses, de cómo una acción puede cambiar el curso del futuro.

Me ha encantado la ambientación, la descripción de los paisajes, las aldeas, los templos, incluso los campos de batalla y en cuanto a estas, de verdad que me parecieron muy buenas, muy vívidas, que te hacen experimentar diversas emociones.

Los personajes me han encantado, principalmente Eelyn. Ella es una guerrera que pelearía hasta el final por defender a su clan y a los suyos, pero conforme avanza la historia, descubrimos que hay en ella algo más allá de solo ser una guerrera.

Si pueden, denle una oportunidad.