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"Nadie sabía quién era. Nadie sabía de dónde venía. Se había convertido en Kaz Brekker, tullido y estafador, cabrón del Barril."

¡Qué historia!
La verdad no sabía que esperar cuando empecé Seis de Cuervos, lo cierto es que, aunque me costó trabajo agarrarle el ritmo en los primeros capítulos, lo he disfrutado enormemente.

La historia, que se centra en un grupo muy peculiar de 6 jóvenes (un jugador, un convicto, un hijo fugado, una Grisha perdida, una chica suli que se había convertido en asesina, un chico del Barril que se había convertido en algo peor) y que se embarca hacia una misión casi suicida con la finalidad de encontrar a una persona muy importante, me pareció muy interesante más porque durante su cometido se enfrentarán a retos que los pondrán a prueba como grupo, mientras que en lo individual cada uno de ellos se enfrentará a su pasado, a sus fantasmas y a sus deseos.

Y es que lo juro, todo esto se desarrolla principalmente en La Corte de Hielo, una gran fortificación donde todos ellos podrían quedar apresados o morir. ¡Por Dios! Esto siempre me mantuvo con los nervios de punta, pensando que en cualquier momento les podría pasar algo malo.

Simplemente diré que me ha gustado todo de esta historia: la trama, los personajes, el desarrollo. No creo que haya un pero.

Tenía un poco de miedo cuando empecé este libro porque, claro, típico de mí, no me había leído la trilogía de Sombra y Hueso (y sigo sin hacerlo) eso me preocupaba porque creí que era como una continuación y no conocía nada sobre la historia, los lugares, los términos y los personajes, pero al final vi que Seis de Cuervos si se podía leer independiente (eso creo) y di gracias por eso.

Lo último que diré es que amé a Kaz con todas mis fuerzas, desde un principio se convirtió en mi personaje favorito, simplemente es un maestro en todo. Siempre teniendo un plan alternativo para todo, siempre con un as bajo la manga.

Sé que mi consejo llega tarde, pero si aún no lo han leído. Háganlo.

Puntuación

♡♡♡♡♡ (5/5)